Descripción
La Malva Silvestre contiene taninos, mucílagos, malvina, vitaminas: A, B1, B2 y C que le otorgan propiedades propiedades antiinflamatorias, demulcentes, antitusiva, laxantes, mucolíticas, hipoglucemiantes, diuréticas, emolientes, expectorantes, antisépticas y cicatrizantes.
Ideal para tratar enfermedades respiratorias,por ser emoliente, suavizar las mucosas y reducir su inflamación.
Sirve para tratar el estreñimiento o un estómago irritado. Se emplea en el tratamiento de heridas, llagas y picaduras de insectos.
También tiene aplicaciones culinarias. Las flores se comen en ensaladas y las hojas como si fuera una verdura.
Cultivada con riego de agua minero-medicinal de manantial, aumentando sus propiedades curativas, en la finca del Balneario El Raposo (Extremadura).
Composición: Malva silvestre de agricultura ecológica.
Preparación: Hervir agua de la máxima pureza. Añadir sobre 1-2 cucharaditas de malva silvestre, tapar e infusionar durante 5 minutos. Colar y disfrutar a pequeños sorbos.
* Malva para las hemorroides: hierve un litro de agua, añade 25 gramos de hojas y flores y apaga el fuego. Deja reposar 30 minutos. Cuela y realiza baños de asiento.
* Malva para la artritis: machaca las flores y hojas de la malva y con el extracto obtenido realiza masajes sobre las zonas afectadas por la artritis para aliviar la inflamación y mejorar la movilidad.
* Malva para garganta irritada y tos: hierve un litro de agua. Añade dos cucharadas de hojas y flores de malva. Apaga el fuego y deja reposar durante 20 minutos. Cuela y deja enfriar a temperatura ambiente. Utilízala haciendo gárgaras tantas veces al día como necesites.
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